La Cámara de Diputados de República Dominicana voto una resolución, el pasado 6 de junio, donde reconoce un grupo de dominicanos/as que “dignifican y contribuyen a fortalecer el prestigio de la comunidad dominicana en el exterior”.
Esta acertada resolución fue iniciativa del diputado de ultramar por la Circunscripción #2, Ramón Ceballos.
En el grupo de reconocidos está la respetable activista pro defensa de los derechos de la mujer dominicana en Puerto Rico, Romelinda Grullón y la artista Charytin Goyco.
Aparece también una señora abogada que responde al nombre de María de los Ángeles Domínguez.
Esta es hija de Angelita Trujillo, hija mimada del dictador, y de Luis José León Estévez (Pechito), coronel de la Fuerza Aérea Dominicana durante la tiranía y uno, junto a Ranfis Trujillo, de los más crueles torturadores y asesinos de la época.
Entre muchos de sus víctimas están los héroes del 30 de Mayo asesinados en la Hacienda María.
Descendientes de víctimas de la dictadura residentes en New York y en Miami me han expresado su indignación por el reconocimiento a esta señora abogada, indignación que comparto.
Extraño resulta que mientras esta es reconocida por la Cámara de Diputados, dicha Cámara nada dice ni hace para defender y reconocer a una mujer como la procuradora general de la República, Miriam German, quien ha sido amenazada de muerte, junto a su hijo, por el narcotráfico internacional.
Si el reglamento de la Cámara Baja lo permite, ojalá esto sea resarcido por respeto a las víctimas de la dictadura y sus descendientes.
