29.1 C
Santo Domingo
sábado, mayo 11, 2024

¡Ojalá no se excedan!

Las más leídas

Sentí cierta aprensión cuando, a través de la pantalla chica, escuché y observé los gestos del presidente Luis Abinader al insistir con marcada vehemencia en que: “A cualquier costo” y “cueste lo que cueste”, enfrentarían las acciones delictivas, en los barrios y esquinas.

Aunque estoy de acuerdo con las medidas dispuestas por el mandatario de lanzar patrullas mixtas de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, a peinar las calles de nuestros sectores con el fin de imponer la paz y tranquilidad; tuve la impresión de que más que al Presidente de los dominicanos, veía al multimillonario que adversa a los pobres.

Lo asocié al momento antes de ganar la Presidencia de la República cuando, con falta de tacto, dijo más o menos, que no le daba dinero “a los ‘tigueres’ de las esquinas”.

Entiendo que fue de manera asaz tendencioso al, repetidamente, hacer alusión a los barrios donde se cometen todo tipo de tropelías. Nunca se refirió a sectores exclusivos de la clase media alta y alta, en los que también se han escenificados crímenes y atracos. Siempre se centró en donde está la pobreza.

Pero, además, me llamó la atención el que dijera que se cuenta con la “inteligencia de lugar” para buscar a los delincuentes. Resulta sintomático el que conjuntamente con esos organismos de inteligencia no se haya erigido una plataforma preventiva que conjure o merme los actos de delictivos.

Constitucionalmente, el mandatario está facultado para tomar las medidas de contingencias que considere.  Pero de otro lado, las mismas hacen notar que su acción es reactiva y que no hay capacidad alguna para erigir una plataforma que prevenga o enfrente a tiempo asesinatos y atracos; y ni hablar de un programa que oriente a la juventud.

Y, aunque se diga que el recrudecimiento de los atracos, otros crímenes y fechorías se dan en otros países de nuestra región, luego del receso de la pandemia, entiendo que ello debió tenerse en perspectiva, y actuar en consonancia. Nada de excusas; es en República Dominicana, donde hay que buscar soluciones a nuestros problemas.

Lo que nos queda es formular votos para que los miembros de las tropas mixtas no se excedan; no apresen ni maltraten a gente inocente, humildes, y de trabajo, muy ajena a la comisión de actos delictivos.

 El autor es periodista, miembro del CDP en Nueva York, donde reside.

 

ResponderReenviar

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Lo último