SANTO DOMINGO. Recientemente varias organizaciones revolucionarias, liberales y movimientos sociales conformaron una mesa de seguimiento y concertación, en la que acordaron elegir una candidatura presidencial unitaria para las elecciones de 2024, mediante una encuesta, decisión que corre peligro de aplicarse por el eventual pacto electoral entre Alianza País y el gobernante Partido Revolucionario Moderno (PRM).
La referida mesa está conformada por Alianza País, liderada por Guillermo Moreno, el Frente Amplio, cuyo presidente es el diputado Juan Dionicio Rodríguez Restituyo, el Movimiento Político Social Gentío, a la cabeza del abogado santiagués, Ramón –Monchy- Estrella, Fuerza de la Revolución (FR), Partido Comunista del Trabajo (PCT), que tiene como secretario general a Manuel Salazar. Además, es apoyada por el Movimiento Bien Común, el Congreso Cívico, Ciudadanos por la Democracia y el Movimiento de Integración Comunitaria de Navarrete.
Aunque no han hecho un anuncio conjunto sobre cuándo se va a hacer la encuesta ni qué empresa la realizaría, habían dos aspirantes de este conglomerado que promovían sus candidaturas presidenciales por sus respectivas organizaciones políticas, la profesora María Teresa Cabrera por el Frente Amplio y el doctor Guillermo Moreno de Alianza País.
A diferencia de Cabrera, que se ha estado moviendo por todo el país con encuentros con diferentes sectores y ha recibido el apoyo de varios movimientos sociales y difunde sus propuestas en las redes sociales, Moreno ha hecho una campaña más tímida con vallas publicitarias; pero enfrentaba al interior de su partido el primer desafío en su carrera por encabezar la boleta de los aliancistas, pues, ha surgido un contendor con la decisión de disputarle la candidatura presidencial: el empresario, periodista y activista social Franc Rosario.
Alianza de Moreno con el PRM, una piedra en el camino
Desde el pasado lunes empezó a correr el rumor de que Guillermo Moreno y Alianza País pactaron con el Partido Revolucionario Moderno (PRM) para llevar al antiguo enemigo de los partidos tradicionales como candidato a senador por el Distrito Nacional, en la boleta de la organización oficialista, apoyado por una coalición de organizaciones políticas que apoyan la reelección del presidente Luis Abinader.
Esta alianza de AlPaís, la cual no nos sorprende, es un duro golpe para este bloque, porque después de meses de reuniones y debates definió una metodología para elegir y llevar una candidatura presidencial alternativa y unitaria para el 2024, mediante una encuesta.
Otros la consideran como una traición y un «palo asechao» a lo acordado en la Mesa de Seguimiento y Concertación de la Coalición, debido a que, aunque las organizaciones que la integran tienen libertad para hacer alianzas con otras fuerzas políticas, desconocían los aprestos en que estaban Guillermo Moreno y su partido.
Aunque oficialmente AlPaís no ha informado que la candidatura de la senaduría de la Capital fue reservada por el PRM para concretar la alianza con Moreno, dirigentes de ese partido tras bastidores han confirmado que pactaron con la organización oficialista.
Según informaciones recibidas de fuentes confiables, la alianza con el PRM se había informado en algunos organismos del partido de Guillermo Moreno e implica la asignación de otras candidaturas a nivel nacional, lo que no está claro ni definido si será a cambio de apoyar al partido de gobierno y la reelección del presidente Luis Abinader, con el argumento de cerrarle el paso a las aspiraciones del exmandatario y candidato de la Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández.
De acuerdo a estas fuentes, Opción Democrática, el partido que dirige Minou Tavárez Mirabal, también está en el proceso de discusión de una alianza electoral con el PRM.
La posición del Frente Amplio
Mientras, en un documento aprobado por su Pleno Nacional de Dirigentes, difundido el pasado fin de semana, el Frente Amplio informó que suscribe el discurso de su precandidata presidencial, profesora María Teresa Cabrera, en favor de la transformación de la sociedad dominicana, planteado en el acto público celebrado en el Club Mauricio Báez del Distrito Nacional el pasado mes de mayo.
Además, el FA calificó como un hito “la decisión de desarrollar una competencia virtuosa entre las precandidaturas presidenciales con miras a escoger la candidatura presidencial alternativa mediante un mecanismo que permita la expresión del pueblo, o la sociedad; con una encuesta, que para la presente coyuntura ha sido acordada a unanimidad por la Mesa de Seguimiento y Concertación”.
Expectativas y contra el tiempo
En su análisis, el Frente Amplio considera que hay una gran cantidad de sectores y ciudadanos que esperan se realice la encuesta “para integrarse de manera militante a la coalición que resulte de ese hecho sin precedentes en los procesos unitarios de la izquierda y los sectores progresistas, y exprese el sentir unitario de estos, y de una plataforma de transformación política y social del país”.
De igual manera, advierte que las organizaciones integrantes de la mesa deben corresponder cuanto antes al compromiso acordado, en el entendido de que, “en primer lugar, es la garantía de la unidad; en segundo lugar, porque si no correspondemos pronto, se podrían disipar las expectativas en favor de la unidad que todavía quedan en la sociedad; tercero, porque hay tiempos establecidos por la Junta Central Electoral a los que debemos ceñirnos de manera estricta los partidos y movimientos que nos regimos por sus disposiciones”.
Un sueño que nunca se ha hecho realidad
La izquierda dominicana y el llamado “progresismo” en la coyuntura electoral de 2024 vuelven a estar de cara a un sueño que nunca han podido convertirlo en una realidad: llevar una boleta presidencial común y candidaturas municipales y congresuales unitarias.
En cada coyuntura electoral se presenta la misma situación de repetir discursos sobre el descredito de los partidos tradicionales y el desgaste del sistema político dominicano, y la necesidad de “construir una alternativa diferente”, intenciones que no pasan de la disertación, porque la desconfianza, el afán de ser cabeza y el sectarismo cada día los separan más y participan de forma separada en las elecciones, unos de forma independiente y otros aliados a partidos tradicionales.
Se perfilan dos bloques de izquierda
Si se llega a materializar la encuesta del bloque de organizaciones encabezados por el Frente Amplio y Alianza País, con otro precandidato en sustitución de Moreno y logran concretar una candidatura unitaria, lo que se vislumbra es que la izquierda participará en los comicios de 2024 con dos bloques.
Una de estas coaliciones estaría integrada por el FA, AlPaís, FR, Gentío, PCT y varios movimientos sociales. De estos grupos Alianza País y Frente Amplio tienen reconocimiento electoral.
El otro bloque con una presencia pública más tímida, es la Unidad Democrática y de Izquierda (UDI) conformada por el Movimiento Patria para Todos (MPT), Partido de la Unificación Comunista (PUC), el movimiento político REDES, el Partido Comunista Marxista-Leninista y la Coalición de Partidos y Movimientos del Municipio Santo Domingo Este, que lleva como candidato presidencial al doctor Fulgencio Severino, presidente del MPT, la única organización de este bloque con reconocimiento electoral.
Los abstencionistas
Por otro lado, en el litoral de la izquierda dominicana siempre ha existido un sector que levanta la bandera del abstencionismo en los procesos electorales, bajo el argumento de que el sistema político es excluyente y que no hay condiciones para una participación exitosa de los grupos progresistas.
En esta coyuntura, el Referente de la Izquierda Dominicana (RID) integrado por los movimientos de Izquierda Revolucionaria (MIR), Revolucionario de Izquierda (MRI), Popular Dominicano (MPD), el Partido Socialista Dominicano (PSD) y militantes independientes ha planteado que el país carece de una respuesta político-orgánica colectiva, unitaria, con posibilidad real de disputar el poder político a la derecha y sectores conservadores.
“Una participación que implique una respuesta política desde la franja de la izquierda revolucionaria y demás aliados antisistema, sólo es posible si se desarrolla un trabajo planificado, a tiempo, dedicado, y dejando a un lado, los intereses particulares y poniendo por delante, por encima de todo, los intereses del pueblo dominicano”, precisa el RID en un documento público. (TOMADO DE EL DESAHOGO DOMINICANO)
