Con la llegada del mes septiembre se inicia la parte más activa de la temporada ciclónica, cuando históricamente se registra la mayor cantidad de fenómenos atmosféricos con sus cadenas de daños humanos y materiales.
La ocasión es propicia para exhortar a las autoridades a aumentar la prevención y la educación de la población sobre estos fenómenos atmosféricos para disminuir los daños que cada año se producen.
Hace 43 años el país fue azotado por los vientos violentos del huracán David, que provocó más de 2000 víctimas y daños materiales que todavía no terminamos de contabilizar.
En esa ocasión muchas de esas víctimas pudieron evitarse con una mayor educación de la población, con un mayor esfuerza de las autoridades para evitar daños.
Hoy el país y el mundo cuentan con un mayor instrumental científico para seguir la trayectoria de los fenómenos atmosféricos y por ende orientar a la población con mayor precisión.
Los mismo podemos decir que la República Dominicana de hoy no es la misma de hace 43 años. Hoy contamos con una mayor infraestructura material que nos ayudaría a resistir los vientos con mayor fortuna.
Aunque millones de dominicanos que viven en zonas de vulnerabilidad. A estos desheredados de la fortuna debemos garantizarle su integridad fisica, aun en las condiciones climáticas más adversas.
Es por ello que insistimos en que las autoridades nacionales redoblen los esfuerzos de prevención y educación a la población, activar a tiempo los organismos dedefensa civil ya que ello contribuye a salvar a vidas.
