El otro día mi inseparable amigo Andrés Reyes me envió un video de Alberto Batet Vitali, pues nada más y nada menos que Leo Marini (1920-2000), cantando su éxito “Tristeza marina”, uno de los boleros favoritos de este argentino que grabó para los sellos discográficos Discos Fuentes y Fania Records.
Volver a verlo cantar ese bolero ícono, muy entrado en edad, me hizo recordar aquella vez que me leía en la prensa que había lanzado un mosaico con los éxitos que popularizó por estos lares. Y para comprobar si aún había Leo Marini para rato, como dijo Flaquitín refiriéndose a La Voz, Felipe Rodríguez, en su presentación en el Centro de Bellas Artes de Puerto Rico, me apresuré a adquirir el disco.
No me decepcionó Leo Marini y debo confesar que ahora que existe esta plataforma de escuchar discos, mato varios pájaros de un tiro, ya que con el mosaico puedo abarcar todo el repertorio de este argentino que no ha deleitado por tanto tiempo.
Lleva por título “Mosaico de mi vida” y es una excelente oportunidad de disfrutar de los boleros que hiciera famosos Marini.
El interés de Marini en el bolero fue motivado los cantantes mexicanos José Mojica, Alfonso Ortiz Tirado y Juan Arvizu, que además de influenciarlo, lo animaron a dar ese importante paso, para gratificación de quienes lo admiramos.
¿Quién bautizó a Alberto Batet Vitali con el nombre de Leo Marini? Pues el tenor lírico español Juan Díaz Andrés y Francisco Fábregas, presentador de un programa radial que se difundía en Mendoza, la ciudad de Argentina que vio nacer al bolerista.
Mosaico de mi vida está estructurado en siete segmentos. El primero contiene los éxitos “Amar y vivir”, “Nosotros”, “Solamente una vez” y “Perfidia”. En el segundo el argentino incluyó a “Llanto de luna” (cuyo dueño es Gilberto Monroig), “Caribe soy”, “Sabor de besos” y “Muñequita linda”.
Mientras que en el tercero figuran los éxitos “Puedes irte de mí”, “Vanidad” (propiedad de Chucho Armando Avellanet) y “Virgen de Medianoche” (inexorablemente el bolero de Daniel Santos).
En el cuarto segmento están: “Mira que luna”, “Cobardía” y “Dos almas” (cuyo dueño absoluto es el propio Leo Marini) y en el quinto figuran “Tres palabras”, “Nieblas”, “Deuda” y “Quizás, quizás, quizás” (ese es de Nat King Cole).
Para el sexto, Leo Marini escogió “Somos”, “Dos Gardenias” (¡ay!, cuánto dueños) y “Toda una vida” y cerró este maravilloso mosaico con “Eclipse”, “María Dolores” (si Monroig te escucha) y “Júrame”.
No sé si antes o después, un gran amigo “me picó” la curiosidad y fue preciso enfocarse en el mosaico “Romántica luz”, estructurado por la extraordinaria e imponente Luz Esther Benítez Rosado, conocida como Lucecita Benítez.
Esta puertorriqueña nacida en Bayamón cuenta en la actualidad con 80 años de edad y sorprendió cuando en 2011 lanzó este exquisito mosaico, “Romántica luz”, digno de escucharse pues contiene los más sonados e icónicos boleros de afamados compositores.
Si a esta mujer, esta cantante boricua, los más viejitos la conocemos por su destacada participación en movimiento artístico de “La nueva ola” o Club del Clan. Caramba, ¡cuántos recuerdos!
La nueva ola o Club del Clan, influenciado por el Rock and roll y nacido en Argentina, tuvo en el solar como exponente al fenecido Milton Peláez. Pero aún hoy en día podemos disfrutar de la Benítez cantando sus discos del Club del Clan.
El contenido de este mosaico de baladas románticas, para no entrar en contradicción diciendo boleros, de Lucecita Benítez lo dejaré para que este viernes bohemio lo descubra usted, estimado lector. Porque, además, no está segmentado, como ocurre con “Mosaico de mi vida”, pue se trata de una sola canción.
Como dato anecdótico, hay un amigo muy querido que se maravilla y le llama la atención la forma tan sentida en que Lucecita interpreta “Nena” en este mosaico. Ciertamente existe una identificación plena de la artista con esta balada o bolero, también magistralmente cantado por Monroig (1930-1996)
Si ninguno de estos dos mosaicos, que yo recomiendo, es del agrado del lector, puede recurrir a Rolando Ojeda y “Aquellos boleros”, una excelente selección de buenos boleros. O escuchar lo que más le agrade. En fin, no sé por qué, pero esta semana se me ocurrió que estaba para mosaicos de boleros o de baladas.
El autor es periodista, novelista, cuentista y poeta
