La herencia gubernamental legada por Leonel Fernández y el modelo económico que propulsó e hizo predominar en la sociedad, resultó tan frustrante y perjudicial para la mayor parte del pueblo dominicano, del país y sus instituciones, que hoy hasta un simple cambio de estilo en el ejercicio de la función presidencial he visto como positivo y aplaudido por la sociedad.
Y no es para menos.
República Dominicana conoció de un Presidente distante, que más que Presidente actuaba tal y como si fuera un Faraón y veía y trataba a los ciudadanos y ciudadanas como vasallos.
De un Presidente con sueños extremos de grandezas y para quien su gloria, su liderazgo político y status social era lo determinante, no la vida presente y futura del pueblo, y tras esos sueños extremos usaba a su antojo los bienes y recursos públicos y controlaba todos los estamentos del Estado.
Un Presidente capaz de conceptualizar sobre leyes y derechos Constitucionales, pero al sujetar al Ejecutivo los demás poderes convirtió en ficción el Estado de derecho.
Al tornar contradictorio el discurso con la práctica, el ex presidente Fernández presentó un país legal para sostener su imagen de demócrata dentro y fuera del territorio nacional, mientras sometió al pueblo a vivir en un país real signados por indicativos sociales, económicos y políticos que nada tenían que ver con una democracia verdadera.
De ahí que en últimos años 8 continuos de gobiernos del ex presidente Fernández, nos mantuvimos como Nación en lugares de primer orden en sentido negativo en áreas fundamentales para el desarrollo, el bienestar y el buen vivir de los seres humanos.
De acuerdo al informe presentado a final del pasado año por el Foro Económico Mundial (FEM), la República Dominicana legada por Leonel Fernández aparece en el liderazgo mundial en ámbitos como la corrupción, pobreza en la calidad educativa y en desconfianza hacia la Policía.
Tal y cómo lo resumió el respetado periodista Juan Bolívar Díaz en uno de sus artículos, quedamos ratificado como país líder en dos renglones que miden corrupción que son despilfarro en el gasto gubernamental y favoritismo de los funcionarios (posición 144 de 144 países evaluados), y en el renglón desvío de fondos públicos tercer país líder al ocupar la posición 142 de 144 analizados.
En este mismo informe del FEM, ocupamos la principalía de 142 naciones evaluadas en lo que a servicios policiales se refiere, lo cual nos dice por donde andamos en lo referente a seguridad ciudadana. La población no sabe si temerle más a la Policía que a las bandas de delincuentes comunes que azotan nuestros pueblos.
La inseguridad ciudadana ha llegado a niveles tales que hasta los propios hábitos de convivencia social y familiar han tenido que modificarse.
De una sociedad donde el vecino se asumía como parte de la familia extendida, hemos pasado a ser una sociedad desconfiada hacia el vecino y mucho más hacia el desconocido; una sociedad encerrada y atemorizada.
Para que tengamos una idea aproximada de la gravedad del tema de la inseguridad ciudadana, les comparto el hallazgo de un reciente estudio hecho por la firma encuestadora GALLUP, entre 134 países, el cual establece que 61 ciudadanos dominicanos de cada 100 consultados dicen tener miedo de caminar solos en la noche en la calle, el mismo porcentaje de inseguridad pública que se registra en Afganistán, un país invadido y en guerra continua durante más de una década.
Ese mismo estudio establece que la percepción de inseguridad pública es más elevada en R.D. que en Haití.
La educación es otro indicador social que aterra.
En lo que a calidad educativa se refiere, en el nivel primario somos el # 143 de 144 países, ocupamos el lugar # 142 en lo que a ciencia y matemática se trata y el 137 en calidad educativa vista de manera integral.
En el informe de Desarrollo Humano del 2013 publicado el jueves de la semana pasada por el Programa de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas, se vuelve a registrar que el promedio de escolaridad de los dominicanos es de siete (7) años, lo que nos dice que la mayor parte de los seres humanos que ingresan al sistema educativo nacional no termina la primaria.
A esa grave situación se pretende responder enseñando a escribir y a leer a quienes, dolorosamente, no saben hacerlo, sin “comprender” que aun parte de quienes tienen títulos educativos sino se actualizan y hacen más integral su propio proceso educativo, quedaran excluidos del beneficio que generará una sociedad mundial que conoce un extraordinario avance en la ciencia, la tecnología y en saber en sentido general; una sociedad, por tanto, cada día mas competitiva.
Guiado por la lógica perversa de un modelo económico que sólo busca desarrollo para favorecer a los más poderosos, República Dominicana aparece como una de las 6 primeras naciones donde es más acentuada la desigualdad social.
La nuestra es una sociedad donde cada día crece el ingreso de los pocos que mucho tienen y disminuye el ingreso de los muchos que poco tienen, siendo así parte protagónica de la región donde mayor es la brecha que separa a ricos y a pobres. Una región, Latinoamérica, que de acuerdo a la Comisión Económica para América latina (Cepal), el 10% de los más ricos recibe el 40% de los ingresos totales, mientras que tenemos un 20% de los más pobres percibe entre un 2 a un 4%.
Esa injusticia social posibilita que alrededor de 4 millones 500 mil de nuestros connacionales caen bajo la categoría de pobre, de los cuales más de un millón al no tener seguridad de qué comer en el día caen la categoría de extrema pobreza.
Súmele, como colofón, a esta República brevemente descrita, el déficit fiscal de más de 200 mil millones de pesos dejado por la administración peledeísta saliente, dinero que ni siguiera la Cámara de Cuentas sabe donde se invirtió y ahora tiene que pagar el pueblo con más impuestos, y agréguele el contrato minero que permitía a la Barrick Gold la explotación y comercialización del oro y otros minerales existentes en Pueblo Viejo Cotuí, contrato mediante el cual la firma minera se llevaba la suma de 97 dólares por cada 100 y sólo 3 dólares correspondían al Estado dominicano.
Esta ignominia llevó a Danilo Media, a catalogar como inaceptable dicho contrato, marcando así distancia con el ex presidente Fernández que lo había no tan solo defendido e impuesto, sino catalogado como uno modelo que podía pautar contratos futuros en el marco internacional.
La realidad descrita tiene varias consecuencias políticas dignas de compartir, aun y cuando algunas resultan aparentemente contradictorias.
Una de ellas es el vasto movimiento de protesta conocido en los 9 meses del actual gobierno, que en el 1er trimestre del año en curso produjo alrededor de 180 acciones de protestas populares y ciudadanas, lo que significó un promedio de dos protestas diarias.
Aunque ocurridas bajo la nueva administración, el blanco político de las mismas resultaba ser Leonel Fernández, no Danilo Medina.
Recuerden que el pueblo gritaba Leonel ladrón con lo del déficit fiscal, pero fue Danilo y el PLD quienes impusieron la reforma fiscal penalizadora de la clase media y los más pobres.
Esta percepción ciudadana fue reforzada por un hábil manejo del oficialismo, que sin condenar públicamente al ex presidente y actual presidente del PLD, exponían razones que inducían al ciudadano común a ver en Leonel el responsable de su desgracia.
Al esto vincularse con un estilo de gobernar que dejaba atrás el estilo faraónico de Leonel, ha contribuido a elevar el nivel de aprobación del actual presidente en proporción semejante al desplome que registra el nivel de popularidad de Leonel.
Esta percepción ciudadana se ha reforzada mas a partir del proceso de revisión del contrato con la Barrick Gold y sus resultados, que al lograr cambiar, en parte, los términos impositivos garantizaran elevar a 11,600 los millones que les corresponderán al Estado, entrando en vigencia de inmediato lo que garantizara 2 mil 200 millones de entrada al gobierno en los próximos 3 años.
El contrato original garantizaba al Estado 10,000 millones de dólares durante la vida del proyecto, dinero que comenzaba a recibir el gobierno a partir del 2019, año para cuando se asumía que la Barrick Gold habría recuperado su inversión, además de una tasa de retorno de un 10%.
Este acuerdo preliminar, que NO modifica la base de un contrato que fue calificado el pasado 27 de febrero como inaceptable por el Presidente, ha sido positivamente valorado por la mayoría ciudadana.
Por lo visto, para el pueblo dominicano cualquier cosa era preferible ante que dejar el “contrato modélico” de Leonel y la Barrick.
Un elemento a contar sobre este tema es el de la presión popular.
Lo alcanzado hasta ahora, que no es mucho, aun siendo positivo, está vinculado en primer término a la acción de amplios sectores de la sociedad que mediante movilizaciones, concentraciones, piquetes, huelgas y declaraciones públicas, acorralaron tanto al gobierno como a la empresa extranjera.
Al renegociar el contrato y a partir de lo obtenido, el presidente Medina da la impresión de responder al reclamo de la sociedad, lograr hundir políticamente aún más a Leonel y obtener en el futuro inmediato unos ingresos económicos que les resultaran de gran utilidad para las finanzas nacionales y para implementar partes de sus planes gubernamentales, algunos que podrían responder a obras muy necesarias en pueblos y provincias donde la visión faraónica de una administración, como la de Leonel, no consideraba útil invertir.
En palabras de nuestro líder, el aliancista Guillermo Moreno, el acuerdo es un avance, pero está muy lejos de satisfacer las legítimas aspiraciones de alcanzar la condición de contrato justo y acorde al marco legal y constitucional vigentes en el país.
Para el presidente de Alianza País la firma de un nuevo contrato para que sea justo tiene que contemplar: la sostenibilidad ambiental, la creación de mecanismos de control del las operaciones de la BG por parte del Estado y el recibimiento de beneficios por parte del Estado no menos al 50% de los beneficios globales de la explotación del oro.
En nuestra visión, la lucha por defender nuestro oro y otros recursos naturales existentes en el subsuelo nacional, es parte de nuestra lucha por la soberanía nacional. Por eso, Loma Miranda es innegociable. Su defensa es defender el agua, el medio ambiente y la producción agrícola de una zona fundamental para nuestro ecosistema. Loma Miranda es vida.
El tema de la minería, el del mejoramiento progresivo del bienestar material de la población, para lo cual el Estado debe y tiene que saldar la deuda social históricamente acumulada con el pueblo humilde y trabajador, y el tema de la inseguridad ciudadana, constituyen banderas y grandes propósitos de lucha que han de marcar nuestra política de oposición critica y responsable frente al actuar gobierno.
A estas grandes banderas que guiaran la acción política inmediata de Alianza País, se agrega también c omo tema relevante la acción responsable y firme en contra del flagelo de la corrupción y la impunidad, con lo cual pretendemos adecentar la administración pública y someter al control y escrutinio de la ciudadanía tanto los funcionarios públicos electos como los designados.
Pero más aún. Para Alpais y su líder, la denuncia y confrontación de la corrupción pública está íntimamente vinculada a nuestra lucha por superar la calamitosa condición de vidas en que desenvuelven su existencia millones de connacionales.
Y esto así, porque mientras más elevado es el nivel de corrupción, mayor será el abismo social que separara a los ricos y a los pobres.
El robo del dinero del Estado tiene diversas consecuencias sociales negativas, ya que ese dinero ilegalmente apropiado por los políticos tiende a reducir la posibilidad de los sectores mas desprotegidos y vulnerables de la sociedad al acceso de una educación de calidad, a recibir atención médica o el disponer de una vivienda decente, entre otros derechos humanos sustantivos negados o restringidos al pueblo dominicano.
En este sentido, queda inscrita la querella interpuesta por Guillermo Moreno en contra del ex presidente Leonel Fernández, presidente de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE), por enriquecimiento ilícito, prevaricación y lavado de activos.
Presentada ante la Procuraduría Fiscal del Distrito Nacional el pasado 24 de enero, aun la querella se encuentra en su fase investigativa.
Incapaces de refutar el fondo del expediente rigorosamente elaborado y con abundantes pruebas que les sustentan, el ex presidente y sus seguidores más comprometidos y beneficiarios de su pasado gobierno, han puesto en movimiento parte del poder que aun tienen para tratar de descalificar a Guillermo Moreno.
La mejor prueba de su fallida estrategia descalificadora lo constituyó la turba movilizada, con intenciones intimidatorias, hacia la Fiscalía cuando la Fiscal Yenni Berenice Reynoso convocó a las partes para escuchar sus argumentos. Con esta acción, propia de los tiempos de la dictadura de Trujillo, el señor Leonel Fernández más que razón y fortaleza evidenció miedo y carencias de sólidos argumentos jurídicos.
En esta batalla contra el Poder, la sociedad tiene y debe de entrar en movimiento en apoyo a Guillermo Moreno, mas cuando sabemos la debilidad institucional que aun caracteriza a nuestro país.
Quienes sienten en peligro el reinado de corrupción e impunidad que han impuesto a través de malos partidos y peores gobiernos, presionan y usan todos los recursos de poder de que disponen para hacer fracasar uno de los más serios intentos históricamente hechos en R.D. para pasar de las palabras a los hechos en lo que a la lucha anticorrupción se refiere.
Como notaran, nuestra conducta, la de quienes militamos juntos a Guillermo Moreno en este espacio de decencia y esperanza que es Alianza País, es distinta a la del presidente Danilo Medina en lo que al combate a la corrupción se trata.
Mientras él en una nueva modalidad de “borrón y cuentas nuevas” nos convoca a no tirar piedras hacia atrás, pretendiendo proteger a las figuras más comprometidas con la corrupción de la anterior administración, nosotros decidimos que no es posible construir un presente de justicia y dignidad, sin ajustar cuentas con un pasado reciente de corrupción e impunidad.
Llegado a este punto de mi disertación sobre la situación política dominicana, se me ocurre decir, porque se me pidió que hablara un poco acerca de Que es Alianza Pais?, que para nuestra entidad la denuncia y condena de la corrupción no expresa una conducta coyuntural o electoral. No!!. La nuestra es una conducta de principio, que marcha pareja al empeño estratégico de instalar un Gobierno Honesto, gobierno que nos haga sentir nuevamente orgullosos y orgullosas de la nacionalidad legada por Juan Pablo Duarte y demás patriotas de siempre.
Alianza País, cuyo presidente y líder es el Dr. Guillermo Moreno, es una organización política alternativa al tradicionalismo partidario, contraria a la exclusión e inequidad sociales, a la corrupción y el clientelismo político. Busca cambiar el rumbo actual que vive Republica Dominicana.
Nos guiamos por principios y valores éticos y trabajamos para construir la República Duartiana, que sería justa, democrática, participativa, soberana e independiente.
Tras ese objetivo nos construimos con un espíritu de nación y buscamos unir la mayor parte de sectores sociales y políticos interesados en el cambio.
Esa política de unidad y colaboración amplia, que desde antes de nacer como entidad denominamos de Convergencia, busca articular una nueva mayoría ciudadana progresista que desafié y derrote en los ámbitos social y electoral al bloque conservador que como tragedia ha hegemonizado la vida nacional durante nuestra historia Republicana, incluida, claro está, la Republica que surgió después de la intervención armada de los EE.UU. en 1965 y la derrota de la revolución democrática que tomó curso a partir de la insurrección popular del 24 de abril del mismo año.
Somos una entidad de naturaleza progresista, democrática y plural, donde participan demócratas, liberales, ambientalistas, religiosos, feministas, izquierdistas o simples ciudadanos/as que se definen como honestos/as.
Nuestra política internacional se norma por la amistad, no por la enemistad. Defendemos la soberanía, independencia, autodeterminación, la paz y la solidaridad.
La inclusión, la tolerancia y la pluralidad son valores esenciales a practicar por quienes integran a ALPAIS.
En las pasadas elecciones ocupábamos el último lugar en la boleta y resultamos el sexto partido más votado. De los 6 candidatos presidenciales, el Dr. Moreno pasó a ser el tercero en votos alcanzados.
En la actualidad buscamos revalidar nuestro reconocimiento electoral, para lo cual el lunes 6 del presente mes depositamos ante la Junta Central Electoral un expediente contentivo de 111,632 firmas, 20 mil mas del requisito de ley, los contratos de alquiler de locales y la información general de los equipos directivos de las 31 Provincias, el Distrito Nacional y de New York, EE.UU.
Cabe indicar que de la cantidad de firmas indicadas, 2,634 corresponde a dominicanos y dominicanas residentes en ultramar, quienes, al igual que los residentes en el territorio nacional, evidencian con su acción su amor a la Patria y su interés de hacer de esta una patria justa y soberana, una Patria para todos y todas
Con la validación del reconocimiento de AlPaís, con todo el esfuerzo de consolidarnos como partido, frente a los partidos y liderazgos tradicionales, lo que estamos es «Construyendo la esperanza.
Como han establecido nuestros órganos directivos, Alianza País es un camino de esperanza para nuestro pueblo, para enfrentar con decisión y firmeza la corrupción, impunidad, desigualdad, inseguridad, pobreza y entrega de nuestros recursos naturales, que han impuesto los gobiernos de los partidos que nos han gobernado en los últimos 47 años.
Alianza País representa la esperanza porque tiene el compromiso, junto a nuestro pueblo, de construir una democracia participativa, una patria justa, productiva, prospera y soberana, tal y como resumen los 7 Ejes Programáticos que sostienen la propuesta de Republica productiva.
Como organización trabajamos para ser una opción de poder en las elecciones del 2016 e instalar un Gobierno Honesto.
Esto será posible, en la medida en que decenas de miles de personas como ustedes se atrevan dar el paso en la dirección correcta, en la dirección que demanda la historia y en la dirección que nos impone el compromiso de refundar la Republica a partir de los valores y los ideales que normaron las vidas de Juan Pablo Duarte y los Trinitarios y de los patriotas de toda nuestra existencia como nación dominicana.
PATRIA JUSTA Y SOLIDARIA.
VIVA LA REPUBLICA DOMINICANA
Notas que sirvieron de base a la Conferencia sobre Situación Política Dominicana y el Trabajo de Alianza País, presentada en Miami, Florida, el 18 de mayo del 2013.
