Voy a comunicar algunas experiencias que surgen del lugar donde me hice adulto en 1959 que contribuyó, sin duda, a marcar parte de mi vida, y que en adición a mi formación académica en la Universidad Autónoma de Santo Domingo UASD, como economista en 1963 determinaron mis vivencias significativas en el sentido democrático, alimentado por las ideas expuestas por el gobierno democrático de Juan Bosch en 1963 que convirtió en 1965 el Movimiento Renovador y esa institución pasa a ser un centro de prácticas distintas a las de formación de una élite para el disfrute de la clase media alta, surgida en la dictadura 1930-1961 de República Dominicana.
A pesar de que en República Dominicana se estableciera la dictadura militar de Rafael Trujillo a partir de 1930, el efecto de la misma en la sociedad del país no fue igual en todas las provincias.
La desigualdad predominante condujo a que los más pobres encontraran refugio en las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, en las que se nutrían y hacían carrera especialmente en las provincias más empobrecidas.
En el caso de la provincia Espaillat, con las tierras más fértiles, yo tuve la suerte de criarme en Estancia Nueva, una zona rural, que tiene la singularidad de que en ese lugar vivieron 3 ex-presidentes de la república.
Ramón Cáceres en 1906 y Horacio Vásquez en 1926 fueron presidentes de la república y ambos participaron en el ajusticiamiento de Ulises Heureaux (Lilís), dictador que había traicionado los ideales del partido Azul, que no solo se hizo violador de libertades, sino que uso el poder para administrar pésimamente la emisión monetaria al grado de emitir moneda inorgánica para sobornar aliados incluso del partido rojo que era opositor.
No es extraño que de esa misma zona rural también lo fuera Héctor García Godoy, presidente provisional en 1966, probablemente debido a las mismas razones que hicieron a Marién García en 1959 un revolucionario que involucró en 1959 una veintena de jóvenes a ser miembros del Movimiento 14 de Junio, como lo fuí yo en Estancia Nueva, como centenares hicieron lo mismo en todo el Cibao.
La actitud de los residentes de Moca, provincia Espaillat, se remonta a 1857, cuando el ex-presidente Benigno Filomeno Rojas encabezó una nueva Constitución contraria a la conducta violatoria de las libertades de los conservadores, como Báez que traicionaron los ideales duartianos desde 1844.
La gente de ese lugar adquiere el sentido de independencia más fácilmente por la extraordinaria fertilidad de sus suelos y eso se traduce en su conducta socio-económica independiente. Así que no fue extraño que yo me criara en un hogar, en que se criticara los excesos de la dictadura de Trujillo y que algunos familiares fueran asesinados por esas razones.
En 1971 fui hecho prisionero y duré un año en prisión porque un supuesto activista del MPD me delató como terrorista mientras era profesor de la UASD y me acusó ante las autoridades del gobierno del doctor Joaquín Balaguer nada menos que de intentar matar al director del periódico Listín Diario, don Rafael Herrera Cabral. De eso me vine a enterar cuando Arlette Fernández, la viuda del coronel Fernández Domínguez, me fue a visitar en Madrid donde me había exilado, con un periódico Listín Diario en las manos, donde aparecía el delator dando la falsa declaración de mis intenciones criminales contra quien precisamente había editorializado pidiendo mi libertad.
Yo fui detenido en el apartamento de Aleyda Fernández, prima de Arlette, junto a Carlos Tomás Fernández y Vladimiro Blanco quienes me habían convocado para que yo revisara una escritura que habían escrito para publicarla en el periódico Ultima Hora donde trabajaba Aleyda. Sin embargo, el servicio de inteligencia del gobierno vigilaba la vivienda de Aleyda porque ella daba protección a perseguidos político del gobierno, pero ninguno de nosotros éramos consciente de ello.
. Después de un año en prisión y con la petición de Rafael Herrera, el gobierno optó por desterrarnos a Aleyda, su hermana Eva, que era mi alumna en la UASD, Carlos Tomás y Vladimiro. La acusación del 8 de febrero de 1971 era risible, puesto que incluía la empleada del servicio doméstico Carmen Santos, y que todos fuimos sorprendidos mientras supuestamente planificábamos el secuestro de hijos de diplomáticos extranjeros y altos oficiales de la Policía Nacional.
