Mis opiniones sobre el tema que encabeza este artículo se basan en que
a) Todo lo que existe es una expresión de la Energía
b) Que la Energía ni se crea, ni se pierde, solo se transforma
c) Si volvemos a aplicar lo más directamente que se pueda la que nos llega del sol o sus manifestaciones, como la lluvia y sus ríos, por ejemplo, reduciremos la presencia del CO2 en la atmósfera para que vuelva a los niveles preindustriales o sea alrededor de 280 partes por millón, de los más de 400 actuales.
La tierra recibe del sol 5.4 X 1024 J que es 4500 veces más energía que la que se consume medido científicamente a través de que un J (un joule) o sea el trabajo, energía o calor por la fuerza de un Newton que es la capacidad de desplazar un kg, un metro por segundo cuadrado.
Toda esa radiación es reiirradiada hacia el espacio dilatada por el uso de la acción humana.
Es decir que mediante las acciones apropiadas en materia de regulación y ordenamiento la energía tiene el potencial de que sea como el aire que es gratis como el propio sol.
Ese pudiera ser el curso si no nos olvidamos que el presidente actual de Estados Unidos no quiere entregar el puesto que legítimamente perdió a nombre de actuar. No como el dirigente de la mejor tendencia del planeta de volcarse a la energía renovable no solo sana al ambiente sino más económica por KW hora.
En vez acoger con beneplácito esa dirección se comporta como vendedor de una compañía de petróleo extraído mediante el denominado «fracking» que es extraído introduciendo agua y otros componentes químicos al subsuelo que provoca rupturas en el subsuelo que presionan y facilitan que los gases fluyan mas fácilmente al exterior.
Ecológicamente muy cuestionable, el sistema permite aflorar dos corrientes contrarias en las elecciones que acaban de transcurrir en USA y esa actitud del presidente derrotado quizás contribuya a acelerar la conciencia humana y la responsabilidad de los que ya somos mayoría frente a aquellos que quieren que el Petróleo siga siendo la fuente de obtención de energía.
La energía fósil no es solo más cara, sino la que conduce a derretir los polos y montañas nevadas y a fomentar la desigualdad que es el mayor obstáculo al verdadero desarrollo.
