El domingo 19 del mes de marzo tuve el gusto y la dicha de reunirme con José Zavarce, sobrino de Néstor Jesús Zavarce Sierralta, conocido comúnmente como Néstor Zavarce, artista y actor venezolano, nacido en abril de 1936 y fallecido el 27 de agosto del 2010, en Caracas, Venezuela.
Además de su vínculo familiar, este joven venezolano también tiene la virtud de haber escrito una bibliografía de su tío. Y qué bueno que en estos tiempos donde predomina el reguetón con sus letras explicitas de mal gusto y gestos pornográficos que en nada contribuyen al avance de la sociedad, este joven haya decidido rescatar lo que fue la historia del gran Néstor Zavarce.
Esa labor es mucho más loable después de ver lo ocurrido en la última edición de los Premios Soberanos, organizados por la Asociación Dominicana de Cronistas de Arte, donde lo urbano y el reguetón demostraron que se apoderaron de este importante galardón y por ende del sentido de la entidad.
Hay que alegrarse de que ya la premiación no esté inspirada en la gran Casandra Damirón (1919-1983), pues estoy seguro que la folklorista se iba a revolcar en su tumba al ver a los niveles que ha llegado el mal gusto en la República Dominicana.
El bolero prácticamente brilló por su ausencia en Los Soberanos y es penoso no ver en los últimos tiempos entre el público, desfilando por la alfombra roja, a artistas de la categoría de Alicia Baroni, José Peguero, Jacqueline Estévez, Dariana (La Coqueta) y Camboy Estévez, entre otros.
José Peguero y Alicia Baroni están haciendo un excelente trabajo con eso de ponerle música a la poesía. Doy fe porque he tenido la oportunidad de disfrutar de las interpretaciones de Peguero musicalizando poemas de poetas consagrados y otros no tanto.
Cuando conversé con Baroni sobre el premio decidí dejar de lamerme la herida. Comprendí que ACROARTE está definitivamente secuestrada por la tendencia creciente de los urbanos y reguetoneros, con el triste argumento de que eso es lo que vende.
Como compositora Alicia Baroni tiene la virtud, el récord, y de eso hablaré más adelante, de haber producido un álbum complemente de boleros.
Al ver aquel abrumador despliegue del barrio como expresión cultural, que no deja de serlo, en los premios, me pregunté si el bolero era un género musical en extinción en nuestro país. Si acaso no estoy empujado por la nostalgia, sino estoy fuera de tiempo.
Pero fíjense que coincidencia más importante: cuando entrevistaron a José Alberto “El Canario” en la alfombra roja reveló que iba a lanzar un álbum de boleros o una producción con boleros. Además, recordé que hace poco Linar Espinal, a quien todos conocen como El Chaval de la Bachata, lanzó una bellísima producción de boleros, de estos temas añejos, íconos, que tanto disfrutamos en las voces de los artistas originales.
Y que José Virgilio Peña Suazo, los últimos espectáculos lo ha dedicado a rendirle tributo a José Rómulo Sosa Ortiz, el inolvidable José José (1948-2019), interpretando los boleros y baladas que popularizara el mexicano, conocido como el Príncipe de la Canción.
Eduardo José Herrera de los Ríos, Eddy Herrera, tampoco se pudo resistir y decidió hacerle un homenaje al inmenso Javier Solís (Gabriel Siria Levario, 1931-1966), conocido como El Ranchero Romántico.
Es decir, que el bolero no ha perdido para nada vigencia, que aún conserva una legión de admiradores que lo disfrutan, que tienen poder de compra, que van a los espectáculos y lo consumen. Pero, más importante aún, que existen muchos artistas de la nueva generación y de los que recién inician que incluyen boleros en sus repertorios. Porque a pesar de la abrumadora presencia del reguetón, lo urbano y el mal gusto, los temas románticos, las letras sentidas, que encarna el bolero, vivirá para siempre.
No insistiré más en que ACROARTE reconozca a Elenita Santos (que por cierto me envió un emotivo mensaje), al Cantante de la Patria, Aníbal de Peña, y al promotor del merengue típico, Rafael Chaljub Mejía. Comprendí que para los dirigentes de la entidad “arte” tiene que ver con lo que está de moda, lo que mueve a las alienadas masas como borregos, sin importar que contribuya a su educación o superación.
Desde el rincón de mis boleros, la bohemia de los viernes, un aplauso fuerte que llegue al infinito, traspase el tiempo y el espacio, para José Zavarce, Alicia Baroni, José Peguero y a todos los que disfrutan cantando, escuchando este género musical que vivirá por siempre.
El autor es periodista, novelista, cuentista y poeta
