Stephanie Lottermoser, es una saxofonista alemana, que el pasado 30 de abril engalanó el Auditorio Juan Bosch de la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña, en un espectáculo, sin desperdicio, con motivo del Día Internacional del Jazz.
La exquisita función de gala fue organizada por Jazzomania Jazz Festival y la Embajada de la República Federal de Alemania en el país, donde también actuó el virtuoso del piano Till -Sjan-Sahm.
Una verdadera experiencia musical para los amantes del jazz, gracias al empeño de Carlos Francisco Elías y Tony Domínguez. Naturalmente, con el apoyo de la Biblioteca Nacional y otras instituciones.
Además de tocar el saxofón con inigualable maestría, Lottermoser interpretó hermosas canciones e hizo un gran esfuerzo en el espectáculo para cantar en español “Quizás, quizás, quizás”, un ícono del bolero, compuesto por el cubano Osvaldo Farrés (1902-1985).
Cuando comenzó a cantar esta canción, que aquí gozó de mucha popularidad en la maravillosa interpretación del estadounidense Nathaniel Adams Coles, más conocido artísticamente como Nat King Cole (1919-1965), de inmediato me llegó la imagen de su adorada hija Natalie Cole, fallecida a los 65 años (lástima), con su hermoso vestido rojo y su voz de ángel.
Nat King Cole, además de cantar boleros famosos con su acento característico, fue un legendario cantante de jazz, a igual que Stephanie, que nos deleitó durante esa memorable noche.
A propósito del Día Internacional del Jazz, declarado por la UNESCO en 2011, esta semana me quiero referir a Rafael Borroto, mejor conocido como Felo Bohr, y a Lourdes Nuviola, la cantante cubana residente en Miami.
¿Qué tienen en común Nuviola y Bohr con el jazz?
Ambos grabaron boleros en tiempo de jazz y se han convertidos en favoritos en las noches de bohemia de quien suscribe. Descubrir a Lourdes, quien es hermana de la extraordinaria cantante Aymée, y a Felo, nacido en Ciego de Avila, Camagüey, Cuba, fue un momento muy especial en mi vida.
Aymée y Lourdes son hijas de Adelaida Elisa Suárez Hernández, quien impartía clases de piano, y su padre, Nelson Vicente Nuviola Bofill, era cantante aficionado.
La música de Aymée se ha inclinado a la fusión entre géneros como el Jazz, la Timba, el Son, el Guaguancó, la Guaracha y la Charanga, pero Lourdes ha preferido abiertamente el jazz como género musical.
Muchos conocen a Aymée por haber encarnado a la guarachera Celia Cruz en una telenovela colombiana y por temas como “Dónde estaba anoche”, junto al Septeto Santiaguero (y, naturalmente, por otros temas), pero tengo la ligera impresión que mucho no conocen a su hermana Lourdes ni la han escuchado cantando hermosos boleros en tiempo de jazz.
Invito a escuchar a esta cubana cantando temas como “Tú no sospechas”, “Añorado encuentro”, “Tu voz”, “Juguete” (esta canción popularizada por el boricua Cheo Feliciano en las voces de ambas hermanas), “Contigo aprendí”, “Qué sabes tú”, “Imágenes”, “Pensamiento”, en fin, toda una producción con una grandiosa orquesta de jazz.
A Rafael Borroto fue Rolando Ochoa quien lo bautizó como Felo Bohr cuando animaba en el Scheherezade Night Club en el año 1962.
Este camagüeyano, quien interpreta los boleros en tiempo de jazz o no con un estilo único, sosegado, cantó con la Orquesta Intermezzo en su ciudad natal, luego en La Habana en 1957 en el Cuarteto Mexi-Cuba.
Temas de Felo como “Si me comprendieras”, “Cómo fue”, “Imágenes”, “Con cuál me quedo”, “Inolvidable”, “Franqueza”, “Tiemblas”, “Alma con alma” y “Yo tengo un pecado nuevo”, hacen que sea un verdadero goce escuchar estos boleros en tiempo de jazz.
Y que afortunado es que el jazz, este género musical nacido a finales del siglo XIX en los Estados Unidos, se haya apoderado de algunos boleristas y boleros para impregnarle un nuevo sabor, una improvisada cadencia. Y que gratificante después de ver y escuchar a Stephanie Lottermoser y a Till Sahm en el Auditorio Juan Bosch, poder disfrutar de dos artistas de la talla de Felo Bohr y Lourdes Nuviola cantando bolero en tiempo de jazz en este viernes bohemio. Definitivamente, no hay espacio para las ensoñaciones y los recuerdos, sino para regodearse en un buen bolero cantado en tiempo jazz. ¡Salud!
El autor es periodista, novelista, cuentista y poeta.
