Dos ejemplos de la misma generación que en vida estuvieron al servicio de las mejores causas sociales y políticas por la libertad del pueblo dominicano, acaban de fallecer: Raúl Pérez Peña e Iván Rodríguez.
Como si se hubieran puesto de acuerdo para iniciar su lucha y despedirse, al mismo tiempo, de su vida terrenal con los mismos principios de la génesis que les motivó a insertarse en las mismas causas de libertad contra la férrea dictadura de Rafael Leónidas Trujillo; su acompañamiento a Manolo Tavárez Justo en la guerrilla contra el golpe de Estado contra Juan Bosch en 1963; su resuelta participación en el movimiento constitucionalista de 1965, su firme oposición al régimen represivo de Joaquín Balaguer y su limpia hoja de soldados de la patria.
Desde el otrora Movimiento Revolucionario 14 de Junio y otros espacios de lucha, éstos legendarios Combatientes se convirtieron en referencias de un largo y limpio historial que nos hace recordar la frase del poeta Manuel del Cabral, cuando dijo: Hay muertos que van subiendo cuando más su ataúd baja.
