Cuando una empresa logra plasmar en una partitura perfecta la cadencia de todas sus operaciones, puede empezar a ofrecer una memorable experiencia a sus clientes de forma constante y confiable.
Esta sería la primera de una serie de acciones que contribuirían con su crecimiento.
Primer movimiento
El manual donde se consigna el paso a paso de sus operaciones se convierte en una tabla de salvación dada la posibilidad de producir el producto o servicio perfecto.
En este nuevo modelo de negocio, donde todo se realiza según los estándares definidos, la métrica de cada acción le permite al empresario descubrir, con bastante precisión, qué quiere su cliente, como y a qué precio lo quiere pagar. Una alineación de tipo láser con el cliente y sus intereses es el gran secreto del éxito empresarial.
Segundo movimiento
El conocimiento profundo de su nicho y la observación rigurosa de su proceso mental emocional le ayudará a entender el camino que recorren sus compradores.
Ajustar sus contenidos a las etapas de concientización, consideración y decisión hasta la compra final podría ser la manera más efectiva de para motivar sus calificados prospectos.
Esta estrategia de información atraerá y deleitará tantos clientes como necesite la empresa con el fin de crear y mantener una larga y significativa relación para ambos.
Tercer movimiento
La empresa deberá prepararse para recibir el flujo previsto de clientes… y de operaciones, ya que no es posible crecer conservando la misma estructura.
La productividad que empieza a surgir exigirá de una gestión distinta, pues ha llegado, por fin, la madurez de la empresa.
Ahora, en la nueva estructura, el personal adquiere una importancia vital, pero como ya se dispone de un manual escrito, entrenarlos con el correcto enfoque hacia el cliente será mucho más fácil.
Contar con un equipo identificado con la nueva visión y un sistema que garantice la misma valiosa experiencia al cliente en cada visita, hará sostenible la productividad.
Ahora que todo va sobre ruedas, solo nos falta seguir midiendo, ajustando e innovando para mantener la alineación con el cliente.
