La República Dominicana, ese encantador pedazo de isla a donde una millonada de viajeros, pasajeros o turistas de todo el mundo, no podía ser más certera al posesionarse en ese pueblo, aldea o villorrio que llaman Davos.
Davos se ubica en Suiza, y todo el mundo aprendió soñando que Suiza es buen escenario para hablar de la genialidad de ser grande al mismo tiempo que pequeño: República Dominicana, un país pequeño, pero grande en sus pretensiones. Y comparón al posesionarse. Los diccionarios definen el término comparón como un dominicanismo que lleva la imagen de pretensioso, presumido. Y eso es.
La vicepresidenta dominicana Raquel Peña viajó a Davos. Y llegó primero que Javier Milei, a quien le reservaron púlpito aparte en el escenario, sólo para que hiciera un bufeo del sistema al que, sin tener mayoría de nada, logró subirse: el carromato de la democracia de la admirada Argentina, y la Buenos Aires querida de Gardel, quien siendo uruguayo fue el Gardel del tango que antes que Milei vuelve loco al argentino.
¿Dejarán los argentinos que Milei baile un tango completo? Tal vez, si consigue una Primera Dama.
Raquel, con esplendor sereno, afirmó en Davos, que la implementación de políticas transparentes en RD ha permitido garantizar la estabilidad económica y social para atraer inversiones.
Milei anda engreído con un asombroso truño de violencia burlesca, predicando que la estabilidad de la economía, y del progreso, y de todo lo bueno, se consigue acabando con la única opción que tienen los pobres: un Estado que los auxilie en su desheredad.
Insistió la señora Peña en promover en el gran escenario, las políticas transparentes y justas para la reducción de los índices de corrupción, lavado de activos y narcotráfico. Y dice que ha sido una de las más importantes estrategias aplicadas por el Gobierno dominicano para garantizar la estabilidad económica y social.
La vicepresidenta Peña no habló desde un púlpito solitario. Fue insertada en el panel “Un momento clave para Latinoamérica”, junto con el presidente de Colombia, Gustavo Petro; la canciller de Ecuador, Gabriela
Sommerfeld; el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Ilan Goldfajn, y el empresario argentino de la industria de la energía, Marcos Bulgheroni, no necesitaba más. Estaba entre sus pares y así, serena, pudo destacar que la corrupción se traduce en el deterioro de la calidad de vida de los habitantes de un país. Milei no habla de eso, todavía. A no ser para atribuírsela a sus antecesores. Pero el crimen internacional ya empezó a intranquilizar los organismos de seguridad de Argentina.
Raquel Peña llamó a crear y desarrollar un modelo de colaboración entre el Estado, -sí, el Estado, Milei- y las empresas privadas, la academia y la sociedad civil, como estrategia que ha permitido aprovechar las perspectivas y propuestas que aporta cada sector.
Después, la vicepresidenta sostuvo varias reuniones entre las figuras que se destacaban en el encuentro. ¿Habrá visto de cerca al fenómeno Milei, para invitarlo a algunas maravillas de este pedazo de isla, colocado en el mismo trayecto del sol?
En Davos, atenta a sus funciones, Raquel estaba presente en el evento montado para lograr seguridad y cooperación en un mundo fracturado, como Vicepresidenta de la República Dominicana.
Bueno, allí Javier Milei, presidente de Argentina, no podía hacer otra cosa que pensar en un Buenos Aires, donde tenía el rancho ardiendo y los bomberos tratando de no pisarse las mangueras, el uno al otro. Aunque no habló de eso. Es que Milei, además de alborotar el gallinero, en apenas un mes de gobierno, se ha convertido en un curioso espectáculo muy latino.
Espectáculo libertario, según proclama, ante el rechazo masivo en su paí0s. O no tan masivo, ya que las centrales empresariales y el Fondo Monetario Internacional, lo andan aplaudiendo. Aquellos para mantener sus ganancias ancestrales y el organismo FMI para seguir cobrando, por lo que le dedicó la mayor parte del tiempo en Davos.
Por segunda ocasión, la vicepresidenta de República Dominicana, Raquel Peña representó el país, esta vez, en la edición número 54 de del Foro de Davos 2024.
Durante los días 15 al 19 de enero, la vicepresidenta Peña pisó firme y serena en el evento, en calidad de panelista, en la reunión en que participaron más de cien delegados representantes de más de mil distintas organizaciones y gobiernos de países de todas las regiones del mundo.
Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, y Hilde Schwab, presidenta y cofundadora de la Fundación Schwab para el Emprendimiento Social, manejaron el evento en presencia de jefes de Estado, de Gobiernos y de organizaciones internacionales.
La vicepresidenta Peña participó en el “Diálogo entre mujeres líderes políticas: Inteligencia Artificial y liderazgo político: obstáculos y posibilidades”, en el que se profundizará en la interacción entre la inteligencia artificial”; también en la sesión en el tema del Cisma Norte-Sur.
La delegada dominicana, la Vice Peña, revisó la forma de ampliar los nexos del país con personalidades y naciones, sobre temas empresariales, y la proyección dominicana en busca de nuevas inversiones.
Peña es una legítima representante de la mujer emprendedora dominicana, como empresaria, dedicada a la vida académica. En el año 2000, llegó a la cátedra en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, en
de grado y postgrado. Allí ha desempeñado funciones administrativas como directora de la carrera de Administración de Empresas y directora del Centro Internacional de Innovación en Tecnología y Administración (CITAM), además de fundar el centro PUCMM-Emprende. Entre el año 2015 y 2020 asumió la Vicerrectoría de Administración y Finanzas.
En marzo del año 2020, aceptó la candidatura vicepresidencial del Partido Revolucionario Moderno, posición que ganó en las elecciones generales del 5 de julio del mismo año. Es miembro de la Dirección Ejecutiva del Partido Revolucionario Moderno (PRM).
Fue designada como presidenta y coordinadora del Gabinete de Promoción de Inversiones mediante decreto 849-21, con el objetivo de promover políticas, lineamientos y mecanismos para incentivar la inversión en sectores estratégicos. Fue designada titular interina del Ministerio de Medio Ambiente, con carácter honorífico. Con el decreto 594-22, pasó a ser presidenta del Gabinete Eléctrico, concluyendo sus funciones como coordinadora del Gabinete de Salud.
Javier Milei, presidente de Argentina, no habló de la situación de la Argentina, sino que leyó su evangelio de sus ideas libertarias. Buscando posicionarse como líder mundial de la libertad; en busca de ser foco de atención en el evento.
Milei llegó a Davos, mientras en Buenos Aires sobrevive el alboroto generado por su gobierno, intentando desbaratar el aparato del Estado y sus instituciones tradicionales, en nombre de lo que dice será una mejoría. Pero siguen las negociaciones por la ley ómnibus con que pretende resumir sus propuestas sin pasar por la institucionalidad del Congreso, donde el debate está al rojo vivo.
Vengo a plantar las ideas de la libertad en un foro que está contaminado de la agenda socialista 2030, lanzó Milei durante una escala en Frankfurt, ruta hacia Davos.
El FMI y Argentina llegaron esta semana a un acuerdo que permitirá, una vez sea aprobado por el directorio del Fondo, el desembolso de casi 4.700 millones de dólares para afrontar los próximos vencimientos de deuda que el país suramericano tiene pendientes.
El FMI ha aplaudido las medidas de ajuste tomadas por el Ejecutivo de Milei poco después de asumir, el pasado 10 de diciembre, mucho más alineadas con el organismo que las del anterior Gobierno argentino, que encabezaba el peronista Alberto Fernández.
La Vicepresidenta dominicana Raquel Peña y el presidente argentino, Javier Milei, andan por caminos distintos, aunque confluyan en un mismo lugar.
