Mirebalais, Gazzete Haití.- La comuna de Lascahobas, próxima a la comunidad dominicana de Bánica, se encuentra bajo tensión. Bandas armadas continúan sus actos delictivos en el país. De hecho, bandidos de las bandas «400 Mawozo» y «Talibanes», que han ocupado la ciudad de Mirebalais durante tres meses, avanzan hacia otras localidades del Departamento Central. Esta madrugada, asaltaron las localidades de Desvarrieux y Savane Lacoupe, entre otras, ubicadas en Mirebalais, cerca de Lascahobas.
Mataron a tiros a un policía en un intercambio de disparos y secuestraron a dos agentes de la Brigada de Vigilancia de Áreas Protegidas (BSAP). Los bandidos también incendiaron viviendas.
En videos que se han vuelto virales en redes sociales, se puede ver el cuerpo sin vida de un policía siendo humillado por pandillas, un oficial de la BSAB secuestrado siendo maltratado y dos vehículos policiales en su poder.
Los residentes huyen
Por el momento, las bandas continúan su expansión en el Departamento Centro. Ocupan la localidad de Serazin, ubicada a casi 2 km de Lascahobas.
Los residentes huyen de sus hogares por temor a ser asesinados. El último día de exámenes oficiales de noveno grado ha sido cancelado. La población está desesperada, informa esta fuente, destacando el aumento de la fuerza policial. Sin embargo, no está claro si han logrado expulsar a las pandillas y evitar que Lascahobas se convierta en otro territorio perdido.
Antes en La Chapelle
Este último ataque armado en el país se produce apenas unas semanas después del perpetrado contra la comuna de La Chapelle, que obligó a casi 9.000 personas a huir de sus hogares, según un informe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
Sin embargo, desde marzo, las comunas de Mirebalais y Saut-d’Eau han sido tomadas como rehenes por bandidos armados, lo que ha provocado el desplazamiento masivo de 147.000 personas.
En Petite-Rivière de l’Artibonite, las cifras también son bastante significativas.
El número de desplazamientos forzados ha alcanzado la cifra récord de 1,3 millones de personas.
