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lunes, julio 1, 2024

Carta pública al presidente Leonel Fernández, líder de la República Dominicana

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21 de mayo 2024

Doctor

Leonel Fernández

Expresidente de la República y

Presidente de la Fuerza del Pueblo, líder de la Sociedad Dominicana.

Distinguido, admirado, respetado amigo y compañero.

En todas las épocas de la historia de la humanidad en las sociedades existentes una parte importante de las personas que viven ahí siguen la corriente que prevalece, aunque ésta no sea de agua limpia. Sin embargo aparecen figuras destinadas y decididas a luchar para cambiar el curso inminente que para otros era imposible de variar, y usted ha demostrado con los hechos que es uno de esos pocos que raras veces aparecen para alcanzar, por y para su pueblo lo difícil o imposible de conseguir, por lo tanto aprovecho esta misiva para ratificar seguir pisando sus huellas y sigamos caminando juntos a un mejor y merecedor porvenir de la familia dominicana, como le prometí apoyarlo y asumir sus ideales y decisiones más difíciles y críticas en toda su exitosa carrera política y de Estado. Ahí estuvimos como parte de la historia para hoy seguir avanzando para concluir el propósito final.

Usted, Presidente, que lo vengo tratando desde que vine de mi pueblo, Peralta, Azua, a estudiar Economía y Comunicación Social al inicio de los 80′ en la UASD, tuve el honor de que me impartiera varias materias, como profesor, usted es un líder  que ha logrado que otros acepten una visión, una iniciativa o asignación de forma que sientan que tiene un propósito, una propiedad, un compromiso personal y una causa común, aunque muchos no lo asuman así en un cien por ciento.

Su don de gente, como decimos, su educación y formación académica e intelectual puede confundir a muchos, su nivel más alto de coraje, sacrificio, determinación, compromiso, dureza, corazón, talento, agallas; de eso es que están hechos los grandes y reales estadistas, para poner esas prendas humanas al servicio de su pueblo, su país, su gente.

Compré e hice mío, lo anterior cuando usted, determinante, formalizó relaciones internacionales con Cuba en su gobierno 1996-2000, en un momento muy difícil del país y el entorno internacional que sólo usted pudo determinar por lo antes señalado, el hecho de apersonarse a la Procuraduría General de la República para dar la cara ante la situación del momento que se debatía sobre su gestión de gobierno, lo que a otros esto les habría dado taquicardia, diarrea y enfermedades, usted lo asumió con un sentido de valentía.

Es una muestra de valor y responsabilidad, cuando junto a los compañeros y los diferentes sectores en una misma semana encabezando una apretada agenda política y académica en Europa, luego en el Cibao, más de tres días en la seccional de la FP en EEUU, cumpliendo su rol y su responsabilidad a la altura de la convocatoria que le ha hecho la circunstancia de la historia y salir del aeropuerto a estar en Santo Domingo Norte con nosotros encabezando un amplio recorrido.

Esto me llenaba, Presidente, en lo personal de orgullo y alimentaba mi energía de un buen ejemplo a imitar con más trabajo; pero también debo decirlo de impotencia ver a otros compañeros con «tantas energías» por su juventud y responsabilidad en la estructura partidaria desde la Dirección Política hasta una Dirección de Base pasando por los miembros de la Dirección Central y el secretariado con sus vicesecretarios, siendo muchos de ellos indiferentes de forma tan irresponsable no valorando en su «consciencia» la importancia de su  integración al trabajo partidario en ésta coyuntura para sacar la ineficiencia y la incapacidad gubernamental personificada en el presidente Abinader en  perjuicio del pueblo dominicano.

Muchos sólo calculando sin trabajar donde iban a sustentar el mejor puesto de trabajo en el gobierno, y solo haciéndose fotos,  videos y selfie más interesado en saludarlo  tres y cuatro veces en una misma actividad y empujando a los reales dirigentes locales para que el capitán lo vea porque hoy otro gallo cantaría, ya que la coyuntura lo hacía posible.

Es cierto, Presidente, que el momento no es más que para prepararnos, como lo vamos hacer, hacia las próximas batallas que nos esperan en el futuro, después de una reingeniería en su próximo congreso para ponerlo en condiciones de seguir siendo una real maquinaria política electoral exitosa, porque somos la organización política revelación del presente y el futuro del país, que del número 18 participando el mismo año de ser fundado alcanzamos la casilla tres y después de menos de 5 años en un segundo lugar, siendo la principal fuerza política de la oposición.

Esto es posible gracias al peso de su liderazgo , inteligencia, entrega y carisma que influyó desde el inicio minuto a minuto del nacimiento,  crecimiento y consolidación de la Fuerza del Pueblo, que hoy más que nunca se hace necesaria la visión y el liderazgo de usted y del partido en su conjunto porque a la República Dominicana le esperan situaciones sumamente difíciles para la estabilidad política, social y democrática, que exigirá de un real y verdadero liderazgo responsable.

Fiel abrazo,

Manuel Brito

Secretario General FP SDN.

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